El teletrabajo y la quiropráctica van de la mano cada vez más. A día de hoy, casi el 40% de las empresas ofrece a sus empleados trabajar desde casa según fuentes de El País. Según la OIT (Organización Internacional del trabajo) el teletrabajo se ha multiplicado por ocho desde el inicio de la pandemia. La seguridad que proporciona trabajar desde el hogar es clave durante este tiempo de pandemia, para evitar posibles contagios en reuniones y contactos innecesarios que pueden realizarse a través de videollamadas. Esto ha supuesto un antes y un después en nuestra forma de relacionarnos tanto a nivel personal como profesional.
Sin embargo, estos cambios han supuesto consecuencias para nuestra salud. El estilo de vida sedentario que conlleva el teletrabajar muchas horas al día está incrementando los casos de dolores musculares, migrañas, fatiga visual, insomnio, y problemas vasculares. La combinación de estas patologías junto al estrés y la ansiedad puede generar un estado inflamatorio del cuerpo, y disminuir su respuesta ante amenazas externas.
¿Qué sucede a nivel lumbar mientras teletrabajo?
Lo que ocurre es que nos volvemos cada vez más sedentarios. La flexión continuada que mantenemos en el cuerpo causa debilidad y atrofia muscular, especialmente en cuello y lumbares.
Entre otras cosas, estar sentado nos afecta de la siguiente forma:
- Se dificulta la circulación en las piernas, llegando a causar varices y arañas vasculares.
- Los discos intervertebrales se desgastan, hecho que causa compresión y puede llegar a provocar una hernia discal.
- La inclinación continuada del diafragma puede provocar situaciones de ansiedad, ya que el oxígeno no circula correctamente.
- Cuidado si cruzas las piernas al sentarse mientras estás en el ordenador, porque puede causarte problemas de cadera.
Consejos para sentirte mejor en el teletrabajo
A veces se nos olvida que los pequeños actos como los siguientes pueden cambiar nuestro día a día por completo, y mejorar nuestro bienestar mientras teletrabajamos.
- Al despertar, organízate el día y establece tus objetivos diarios.
- ¡Muévete! Intenta hacer deporte o estiramientos por la mañana, y actívate para afrontar el día.
- Desayuna equilibradamente y evita los azúcares, para mantener tu energía nivelada durante el día.
- Para y respira: haz pequeñas pausas para respirar profundamente y conectar con tu alrededor. Aprovecha estos momentos para agradecer todo lo bueno que ha pasado durante el día.
- Enciende tu playlist favorita para motivarte mientras trabajas.
- Antes de dormir, intenta desconectar de las pantallas y, por ejemplo, relájate leyendo tu libro favorito.
Solución quiropráctica
Si quieres saber más sobre cómo puedes mejorar la calidad de tu día a día en tu trabajo, la quiropráctica cuida tu columna y consigue que tus nervios funcionen libres de inflamaciones y bloqueos.
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